Tres cuerpos sin mirada enuncian palabras en una suerte de triángulo cuyos vértices se acercan y se alejan entre sí...amanecer alto cielo plantea el desvanecimiento del lenguaje en cuanto elemento escenográfico, a través de diferentes prácticas textuales que entrelazan sus materialidades. Así mismo, aborda diferentes cualidades de la visión y cómo estas modifican los cuerpos y la percepción sobre ellos, inspiradas en algunas prácticas sobre el mirar propuestas por la coreógrafa y videoartista Lisa Nelson. Tenemos una danza de manos que miran, de ojos que tocan y de cuerpos que se borran.
"Si antes me ocupaba de objetos y de mi propio cuerpo para desgastarlos mediante una acción insistente, mi trabajo actual retoma la idea de desgaste y desaparición de un cuerpo –ese tótem entendido como una entidad física, moral y espiritual–, pero esta vez, además, un cuerpo escurridizo que es la textualidad", explica Nazario Díaz.
En amanecer alto cielo tres cuerpos sin mirada enuncian palabras en una suerte de triángulo cuyos vértices se acercan y se alejan entre sí, estableciendo relaciones equiláteras, isósceles o escalenas entre ellas, organizando distancias palpables y subjetivas entre lo que se nombra y lo que ya empieza a deshacerse.