En el marco del programa Babestu prepara el proyecto que se basta a sí mismo, una propuesta para entender el lenguaje como algo plástico y performativo, una forma.
Durante su residencia en Azkuna Zentroa ha creado un archivo de videos en torno al movimiento de personas en ambientes de ocio nocturnos al que ha dado forma a través de la performance.
"La primera aproximación fue la del montaje de los brutos. Después busqué una forma que fuera una situación más cercana a la performance, es ahí que, replicando el gesto, vuelven a los torsos proyectándolos directamente en los cuerpos de los performers. Esta decisión vehicula la articulación de un nuevo video y la de posicionar en un espacio esos cuerpos que se mueven. Es ahí donde está la guinda de nuestro pastel", relata la artista.